domingo, 16 de diciembre de 2012

A veces pasa.

Realidades aplicadas a la sangre de unas lineas,
a la carne de los versos que caminan,
a la diosas de mentira, y un te quiero a cada rosa y cada espina,
y un clavel que llora un mar de purpurina,
y caderas que encadenan cada juego de palabras,
cada cara y cada máscara caerá como las ramas,
del otoño de mi invierno, del infierno y de sus llamas,
de las damas del cuaderno y de las sábanas sudadas,
quién es quién en este réquiem, que es un baile de disfraces,
donde las manos se cruzan en roces que hacen las paces,
yo qué hago, tu qué haces, naces, creces, cierras bares,
y flotando este mar chocando siempre tan casuales,
porque estamos tan perdidos en las lineas de la historia,
que celebro cada encuentro, por contarlo en mis memorias,
donde nadie tiene nombre, y las personas son humo,
que se esconden en renglones de cada cuento nocturno,
realidades aplicadas a un contexto tan confuso.
al sabor de un cigarrillo, al amor, al sexo, al uso,
a la guerra por a paz con uno mismo de noche,
 y a un corazón de cristal, que pide poner el broche.

Soñad, amigos.


jueves, 13 de diciembre de 2012

Somos cuentos contando cuentos. Nada.

Cuando ya no puedes decirlo, es cuando necesitas gritarlo. El don de la oportunidad es algo infravalorado. Una canción, una pelicula, una persona. No es el qué, ni el quién, ni el dónde. A veces importa un carajo hasta el cómo. Todo se reduce a una pregunta: Cuándo. Cuándo esa pelicula, esa canción y esa persona, y da igual quién o qué sea. Solo importa el momento en que pasa por tu vida, y lo cambia todo, y así hasta vaciarnos y completarnos, y morir, claro. Siempre morir. Para eso también hay un cuando, y para eso también importa un carajo el resto de las preguntas, buenas noches.


un café de media noche para combatir el sueño,
y el empeño del insomnio es un castigo por no estar sereno,
un velatorio y un entierro, 
bautizo de la pena y comunión con el recuerdo del momento,
Diciembre frío,
 y ya no sé si contra mí o conmigo,
las luces de Madrid me hacen sentir un crío,
y pensar que te quedaba tanto tiempo,
con una lagrimita dando vueltas de campana por el centro,
volvería atrás y siempre y cuando no vuelvas a hacerlo,
sabes que te guardo ese paseo...
la coraza de madera que se hinchaba de tus llantos,
dejó crecer las plantas en tu pecho hasta el techo de tu cuarto,
haciendo ese jardín de tus encantos,
y tú con el de más y yo el de menos y anduvimos separados,
y ahora todo cambia y todo mueve todo,
y vuelve, todo vuelve y yo escribiendo solo,
y tu me esperas a la vuelta de mi vuelta,
y el beso que te debo será cuando echemos cuentas,
vamos andando a tientas,
vendados y tirados por riendas,
y como los caballos temerosos de no conocer las sendas,
y el misterio es lo bonito que nos queda,
siguiendo hacia delante y compartiendo todo lo que nos desvela.

N.V.
 
 

lunes, 10 de diciembre de 2012

Mierda flotando.

La mierda flota y nosotros somos pequeños. Puede sonar duro pero ahora sobrio me vuelve un pensamiento que me sobrevino la otra noche cuando no lo estaba. Somos pedazitos de vivencias en constante comunicación, como hilos de marioneta que a veces se enredan y hacen que choquemos entre nosotros, a veces alguien te tira la copa, a veces alguien mata a alguien y a veces nada con nadie. Nada es importante si todo no lo es, y hay una belleza especial que a veces se vislumbra entornado los ojos y viendo a través del humo y las luces brillar los hilos. La gente va y viene, algunos se portaron mal y otros bien, con cada uno, rango y comportamiento no van de la mano, solo es nada en un todo y todo da igual o no, mierda flotando
en un cosmos blanco puro esperando la muerte y la nueva vida. Es precioso.


Cuando paró la tormenta y las luces se apagaron,
solo quedaba un cigarro, y chillaba la conciencia,
y en la almohada de su lado, tan llena de sus carencias,
agotaba su paciencia, tuvo que darle un abrazo.
cógeme ya de la mano, que me pierdo cada día,
átame corto con lazos, que brillen de tu saliva,
espósame con los hilos de marioneta a la vida,
que soy mucho peor persona, si no te tengo de amiga,
B.B.